jueves, 21 de abril de 2011

CHIPIRONES EN SALSA ARMORICANA.

Hace unos días me decía una de mis sobrinas que no subo recetas de pescado, que parecería que no lo comemos nunca.
Y no es cierto. En esta casa se consume pescado en las mismas proporciones que en cualquier otra. Lo que ocurre es que aquí solo tenemos pescados de agua dulce (Un día hablaré de la tenca) y, aunque en las pescaderías hay mucha variedad, raro es que se salgan del tópico. Lo que más consumimos, lo confieso, es pescado congelado.
Cuando vienen los ingleses, pescado o marisco todos los días. Allí, ya sabéis, se comen poco, y vienen aquí a desquitarse de la abstinencia forzada.
Si el bichejo no entra en mi cocina -MI laboratorio-, en cambio los calamares me privan. Guisados de cualquier manera, me encantan.
Y van a ser en salsa armoricana, mal llamada americana. Mi amiga Pilar-Cocinica dice que ella da la batalla por perdida y yo la animo a que reivindique conmigo el nombre real de la salsa. Salsa ARMORICANA, de la Armórica, la antigua región del norte francés que abarca toda la Bretaña y Normandía. Si buscáis encontraréis varias recetas, también se la conoce como "Bisque de mariscos".
En rigor, debe llevar gambas o langostinos. En este guiso prescindo de ellos porque el aceite de haber sellado los chipirones da suficiente sabor. Pero a quien le guste...
Necesitamos:
1 kg. de chipirones.
1 rebanada de pan asentado.
Un poco de leche para humedecer el pan.
Un huevo batido.
Un toque de nuez moscada.
1/2 vasito de aceite
Para la salsa:
1 cebolla mediana.
1 puerro.
1 diente de ajo.
1/2 kg de tomates.
1 cucharada de  concentrado de tomate.
1 copa de coñá.
1 guindilla.
Caldo de pescado.
Se limpian los chipirones, se apartan los rejos y alas y se da la vuelta a la vaina (parece una tontuna; pero se sellan mejor que con el palillo).
Poner a remojo la rebanada de pan con la leche. En un bol poner la miga de pan escurrida. Batir el huevo y mezclar. Añadir las alas y los rejos picados (o enteros, si son pequeños) y un poco de nuez moscada. Rellenar los chiprones con esta farsa.
En una olla de paredes altas, echar un buen chorro de aceite y, cuando esté caliente, dar una vuelta a los chipirones para sellar la abertura y dorarlos ligerísimamente. Reservar.
En el mismo aceite echar la cebolla y el puerro cortados finos. Salar. Cuando estén transparentes, agregar la copa de coñá y flambear, añadir el tomate pelado y despepitado,  cortado en daditos y dejar hacer veinte minutos; colocar los chipirones y añadir el caldo de pescado hasta el nivel, sin cubrirlos. Tapar y dejar hacer hasta que estén en su punto (15 min. aprox.). Corregir de sal.
Si los chipìrones han soltado mucho jugo, es probable que la salsa quede un poco líquida. En ese caso, sacar los chiprones y espesar la salsa con un poco de maizena o media tacita de nata.
Se acompaña de arroz salvaje.

7 comentarios:

Tita dijo...

Con dar la vuelta a la vaina ¿te refieres a ponerlos del revés?

Maravillosa receta, aquí también nos encantan los calamares y chipirones. Esta cae en breve

Abrazos

Mari Carmen dijo...

Buen plato, me gusta el arroz de acompañamiento. Besitos.

La de la tiza dijo...

Sección consultas del oyente:
¿Y como los cierras los chipirones si no es con el palillo?
Quedo a la escucha de su respuesta, una admiradora.

Carmen dijo...

Riquísimos y mucho más con ese arroz con que los has acompañado.

Sabía lo de darles la vuelta, no falla.

Que disfrutes la S. Santa

Maria Pilar-COCINICA dijo...

Valentín me alegra que nos unamos para revindicar la salsa Armoricana, que además es riquísima.

Yo también hubiera prescindido de las gambas, el sabor de los calamares es único, me gustan de todas las manera.

Besinos

Juan dijo...

Como profesor de francés sepa ud. que alabo su corrección, pues como bien dice, es salsa armoricana, y no americana, y como cocinero y amante de la buena mesa, no puedo sino darle un 10. ¡gran receta! ¡Felicidades!

Valdomicer dijo...

Juan:
Sepa usted que es la primera vez en mi vida que me dan un diez en algo.
Se lo agradezco.
Me alegra que le haya gustado la receta, ese era mi objetivo.
Un abrazo.