viernes, 6 de diciembre de 2019

LOTERÍA NAVIDEÑA 2019.

Vuelvo a comparecer, como todos los años, para ofreceros compartir mi lotería.
Me la acaba de traer Víctor desde Fregenal de la Sierra, aunque la administración de lotería es Colomer, de Jerez de los Caballeros.
El número, ya lo veis, es el 91802.

Esperando estoy a esas nueve (9) primeras personas dispuestas a compartir nuestra suerte utilizando el sistema habitual.
Que la diosa Fortuna nos sea propicia. Yo ya tengo el champán puesto a enfriar.
P.D. Ya ha pedido la participación MaryLu por Fb.

sábado, 18 de mayo de 2019

ACEITUNAS SECAS AL SOL.

Hace tres años al cumplirse el IV centenario de la publicación de la segunda parte del Quijote, me encargó la Sección de Historia y Arqueología del Ateneo de Cáceres, una charla sobre la alimentación en dicho libro.
Otros miembros de la Sección se ocuparon de diversos aspectos como el vestido, la mujer, la medicina, etc.
Tuve que releer el libro prestando atención a los alimentos que en él aparecen. En total son 88 los alimentos citados. Curiosamente, no aparece ninguno de los traídos del Nuevo Mundo.
En dos ocasiones se citan las aceitunas secas que Sancho saca de su zurrón:
"No faltaron aceitunas, aunque secas y sin adobo alguno, pero sabrosas y entretenidas." (Cap. LIV 2ª parte).
Despertó mi curiosidad el hecho de que se consumieran aceitunas secas y, sobre todo, sin adobo alguno. Me parecía increíble.
Busqué información al respecto; pero parece que tal forma de consumir aceitunas ha desaparecido definitivamente, excepto una cita perdida en la que se describía la conservación de vegetales secados al sol y se nombraban, casi de soslayo,  las aceitunas.

Probé hacerlas aquel mismo año y resultó una experiencia divertida. Dejé secar la fruta en el árbol como se hace, por ejemplo, con las ciruelas en vez de secarlas al sol.
En contra de lo que se podría suponer, no amargan en absoluto debido a la pérdida total del alpechín, recordando su textura muy semejante al de otras frutas "pasas" aunque nada dulces.
Para conservarlas, puse la mitad en salmuera y la otra mitad en aceite y aliñadas con ajo, cominos y pimentón. Las conservadas en salmuera duraron alrededor de tres meses, las de aceite hasta que se terminaron.
Este año he repetido la experiencia y creo que voy a seguir con ella.

domingo, 31 de marzo de 2019

HINOJOS BRASEADOS.

La técnica culinaria del braseado (o breseado, aunque este término no está reconocido por la RAE) consiste en guisar un alimento en su jugo a fuego lento.
En esta ocasión voy a elaborar unos bulbos de hinojo, aunque también se puede hacer con puerros o con endibias. El hinojo se corta en pedazos grandecitos, el puerro en trozos de 8 ó 10 centímetros y si son endibias, cortadas a la mitad. En cualquier caso conviene quitarles las hojas exteriores que suelen estar feas.
Necesitaremos un recipiente apto para el fuego (gas, vitrocerámica o inducción) y para horno. Existe un instrumento llamado "brasera" de paredes bajas y con tapadera; pero nos sirve cualquier cacerola que pueda ir al horno.
Ingredientes:
4 bulbos de hinojo.
50 gr. de jamón cortado en dados.
1/2 l. de caldo de verduras.
Un chorro de aceite.
Un chorrito de vino blanco. (Yo suelo prescindir de él).
Sal.
En una cazuela ponemos un chorro de aceite y salteamos en él los dados de jamón y reservamos.
Salteamos, a continuación, el hinojo cortado en pedazos hasta que coja color. agregamos los tacos de jamón, el caldo (en su caso el vino) y la sal. Guisamos a fuego suave unos 20 min. hasta que notemos que está suficientemente tierno.
Retiramos del fuego y le damos un toque de horno a 180ºC.
Listo para comer.

jueves, 28 de febrero de 2019

CERDO A LA ALENTEJANA.

Me llamaron unos amigos que regresaban de unas cortas vacaciones en Portugal por si teníamos un rato libre y así nos veíamos, charlábamos y cenábamos juntos.
Encantados venían de su viaje. Habían disfrutado de buen tiempo, habían visitado lugares preciosos y disfrutado de una gastronomía que, antes, no pudieron ni imaginar.
Uno de los platos que llamó su atención fue el cerdo a la alentejana, una combinación de cerdo con almejas que definieron como "mar y dehesa". Me preguntaron si conocía la receta, lo que afirmé, pues ese plato típico de la cocina del Alentejo es frecuente en mi mesa. Si pasáis alguna vez por el Alentejo, lo encontraréis en las cartas de los restaurantes como "perna de porco à alentejana".
Y ahí va la receta:
Necesitaremos.
800 gr. de magro de cerdo.
250 gr. de almejas.
2 ó 3 dientes de ajo.
Carne de ñoras o de pimiento choricero.
Comino, orégano, tomillo... (opcional).
Un chorro de aceite para el adobo y otro para abrir las almejas.
Un chorro de vino blanco. (Yo suelo usar coñá). (Aguardente velha)
Sal.
La carne de pimiento se vende en tarros en Portugal (massa de pimentão).
Lo primero será hidratar las ñoras en agua templada para sacarle la carne raspando con una cuchara.
Cortamos la carne en pedazos de a bocado y los ponemos en un bol. Agregamos la sal, la carne de pimiento, el ajo majado, las especias, el aceite y el coñá. Revolvemos y dejamos reposar al menos 24 horas. (A más tiempo, mejor).
En una sartén echamos el chorro de aceite y salteamos la mezcla hasta que estén doraditos los pedazos.
Mientras, en otra sartén, con un chorro de aceite, doramos otro ajo y lo retiramos. Abrimos las almejas con la sartén tapada y sacudiendo de vez en cuando. Una vez abiertas las almejas, retiramos las cerradas y vertemos sobre la carne. Mezclamos con cuidado y está listo para servir. A veces se sirve con un poco de cilantro picado.
Como veis es una receta harto sencilla.

sábado, 9 de febrero de 2019

ENSALADA DE BONITO CON FRUTAS.

A ver si consigo sacudirme la vagancia y retomo con seriedad la buena marcha de este blog.
No es el primer intento, incluso he faltado a mis promesas de continuidad anteriores. No obstante tengo buena cantidad de recetas pendientes desde hace alrededor de 3 años, sólo me queda publicarlas.
A ello vamos.

Tengo la suerte de disfrutar de amistades que nacieron en torno a este blog, en alguna ocasión he comentado que podría dar la vuelta a España visitando alguna de ellas en cada parada.
Alguna de esas amistades han llegado a convertirse en íntimas, tanto que han llegado a ser compañía y ayuda imprescindible en situaciones muy apretadas. Mi (nuestro) agradecimiento.
Y como de cocina se trata, también nos intercambiamos nuestras elaboracionbes. Entre esas amistades está la persona que mejor hace los escabeches (después de mi abuela, claro) de este mundo y alguna vez ha caído por casa algún tarro del mejor escabeche de bonito que se pueda imaginar.
Y con uno de esos tarros hice, un año ha de ello, esta ensalada con frutas.

Necesitaremos:
350 gr, del mejor bonito en escabeche del mundo.
2 manzanas.
2 zanahorias.
1 bolsa de canónigos o berros.
El zumo de una naranja.
Pimienta negra recien molida.
Aceite de oliva.
Sal.
Pelamos y cortamos las manzanas en láminas y las zanahorias en bastoncitos.
Con el zumo de naranja elaboramos el aliño, añadiéndole la sal, la pimienta, el aceite de oliva y parte del jugo del escabeche. Emulsionamos con las varillas y se lo agregamos a la fruta. Dejamos en maceración 15 minutos.
Pasamos la fruta escurrida a la ensaladera, cubrimos con los canónigos y colcamos encima de todo el bonito.
Regamos con un chorro de aceite y unas vueltas del molinillo de pimienta.