Son dos viejas tradiciones:
Una la de dejar el 23 de Junio para celebrar el "día del socio" y terminar la fiesta con una "Queimada".
Haciendo los preparativos.
Otra, que se remonta a la más antigua sabiduría de los hombres: La Astrología. A falta de otras cosas más apasionantes que hacer, los hombres primitivos observaban los astros.
El Sol era el más importante de todos ellos. Iba desplazándose en el horizonte cada vez que salía o se ponía alargando o encogiendo los días, marcando dos puntos en el horizonte para su salida y otros tantos para su puesta. Y esto sucedía con una periodicidad tan fiable que construyeron templos para marcar esos puntos y determinar las épocas de siembra y recogida de sus cosechas. Esos puntos eran los "solsticios" esto es "solis statio" o los puntos donde el Sol se detiene. Es cierto que durante tres días el Sol se pone (aparentemente) en el mismo punto del horizonte, luego retrocede lentamente hacia el Sur. El solsticio de verano.
El rito del fuego.
Ese tercer día se encendían grandes hogueras en el horizonte para así "prolongar" el ocaso iluminando el horizonte y quemando los malos deseos de la humanidad.
La cristiandad festeja ese día el nacimiento del Bautista.
Víctor ensayando la visita al infierno.
Un antiquísimo rito celta consistía en hacer pequeños fuegos en los que se quemaban ramas (mirto, muérdago, romero, etc.) en las que se depositaban los malos augurios, pasando, a continuación las manos por encima del fuego. De ahí el saltar las hogueras.
Esta costumbre permanece en muchos sitios con algunas variantes. Una de ellas es la de "la queimada". Se quema el alcohol del aguardiente con azúcar, desaparecidos los males, nos lo bebemos.
Este año el maestro de ceremonias ha sido un conocido vuestro al que no tengo la menor intención de criticar.
Más información en:
http://blogs.tercerainformacion.es/victorcasco/2009/06/24/fuego-y-estrellas/
9 comentarios:
Cuantas tradiciones tenemos en España. Esta diversidad es la que nos enriquece.
Bs
Celes:
Algunas muy bonitas, otras, francamente salvajes.
Besos.
En Higuera la Real, mi pueblo, se saltaban las candelas por San Bartolomé, el 23 de agosto. Hoy la fiesta ha derivado en algo que importó el Señor Cura de entonces y que no tiene nada que ver con aquellas magníficas candelas que saltaban los muchachos...
Un abrazo.
Las gafas del maestro de ceremonias, me suenan un montón...
¡quizá si le ponemos barba...!
Nina:
La Iglesia ha mantenido o destruído las tradiciones a su antojo, incluso, las ha introducido dónde no las había.
Curiosamente, esta es una de las fiestas paganas que no consiguió erradicar junto a la de los Carnavales.
Pedro:
Cuando las barbas de tu vecino veas cortar....
Ya veo que disfrutásteis de la noche de San Juan de forma variada. Me alegro mucho. Besitos.
Mary Carmen:
Y no he contado que después se montó un obsevatorio astronómico en la azotea. Como yo ya no estoy para heroicidades, no subí; pero los que lo hicieron vieron los anillos de Saturno.
Puedes verlo en:
http://blogs.tercerainformacion.es/victorcasco/2009/06/24/fuego-y-estrellas/
En mi pueblo esa noche se elige a la reina para las fiestas que se celebran la última semana de agosto y se hacía -fijaos en el pretérito imperfecto- una especie de mercadillo donde se vendía turrón de guirlache, pulseras artesanales y demas material hecho en casa. De fondo, eso sí, una verbena que cada año ha ido empeorando tanto en calidad como en repertorio y en hora de cierre: siempre un rato antes que el año anterior.
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