sábado, 28 de julio de 2012

PULPO AL HORNO.


Curioso animal el que tiene la sangre azul, por ejemplo, el pulpo. Y no es porque pertenezca a la aristocracia, es porque tiene hemocianina en vez de hemoglobina. Así de sencillo.
Tiene también tres corazones el pulpo. Me lo imagino pintando en las tapias seis corazones ensartados en una flecha, como si fuera una brocheta, para publicar su amor por cualquier pulpita. Item más, utiliza una de sus patas (la tercera por la derecha) para copular, lo cual da lugar a unos cuantos chistes fáciles en los que no pretendo profundizar.
Pero lo más interesante de esta animalito es que se porta maravillosamente en las cazuelas y que no conozco a nadie a quien no le guste.
Antes, era poco frecuente en nuestras mesas porque su carne es muy dura y era preciso golpearlo o serenarlo durante varios días para que estuviese mínimamente comestible. Desde que se extendió la técnica de la congelación empezó a ser habitual en las cocinas domésticas trascendiendo de los chiringuitos y de los bares de los puertos de mar y, claro está, de los pulpeiros que venden este producto en las calles gallegas.
Hay cientos de formas de prepararlos a cual más rica, últimamente he comido en Portugal el pulpo a lagareiro (del que publiqué la receta) y el pulpo a la brasa, sabrosísimo.
Cada sitio tiene su forma personal de guisar el pulpo, una muy curiosa es el pulpo al horno (pop es forn) típico de la isla de Menorca. Yo he recogido la receta del blog de Celes "Sal y azúcar" y es uno de los platos más socorridos en los concurridos banquetes familiares de los fines de semana.
Necesitamos:
1 Kg. de pulpo congelado. (De lo contrario habrá que congelarlo para que enternezca).
1 Kg. de patatas.
pan rallado.
2 ó 3 dientes de ajo.
Unas cañas de perejil.
1 chorro de aceite de oliva.
1 vaso de leche.
Descongelamos el pulpo y lo cortamos en tacos.
Pelamos y cortamos en rodajas las patatas.
Mezclamos el pan rallado con el perejil y con los ajos muy picados y rebozamos los tacos de pulpo con esa mezcla.
En una fuente de horno colocamos una capa de patata y salamos, ponemos encima otra capa de pulpo y vamos alternando para acabar con una capa de patata.
Vertemos la leche por encima.
Habremos reservado un poco de la mezcla de pan rallado o nos habrá sobrado del reboce. Lo mezclamos con un buen chorro de aceite de oliva y cubrimos totalmente las patatas.
Lo introducimos en el horno precalentado a 200º durante dos horas aproximadamente. Si se hace con pulpo cocido con una hora será suficiente.
Recomiendo hacerlo para familias numerosas, para dos personas no queda bien y frío.... no está tan bueno.

10 comentarios:

Unknown dijo...

La verdad es que es un animalejo de lo mas completo. Y como bien dices, a quien no le gusta???. No te imaginas lo que me ha gustado esta receta, me parece de lo mas original. Seguramente no tardare en deleitarme con ella. Un abrazo

Pilar Abalorios dijo...

Cúanto desconocía sobre el pulpo, tan aristocrático, tan romántico, tan habilidoso...y esta receta tan rica.

Besos

FERNANDO SYRAH dijo...

Sensacional entrada.......como siempre, claro.

Un abrazo.


FERNANDO SYRAH
http://vinogastronomiayviajes.blogspot.com

Rocio y Josemanuel dijo...

En casa, en concreto a la pequeña le encanta el pulpo y es todo un clasico en varias posibilidades que hasta ahora conociamos...pero esta tuyo me tomo buena nota...que rico debe estar!!!
Besos

Contando los sesenta dijo...

Me ocurre como a Pilar, desconocía las habilidades y cualidades aristocráticas del pulpo. Sabido, produce cierta conmiseración transformarlo en plato pero la receta tiene un aspecto inmejorable.

Tita dijo...

Buenísimo lo de los 6 corazones ensartados...qué buena pinta tiene la receta!!

Besos

Unknown dijo...

PA,COMERSELO TO
UN SALUDO
MARIAN

ODRY dijo...

Ostras, es una receta que nunca había visto, me parece ideal para hacer cuando vengan invitados.

Un besote.

Anónimo dijo...

Si que tiene que estar bueno esto, sí.

Por qué obvias los chistes? Muy mal, no se me viene a la cabeza nada con que sea con la tercera manopla y un restregón...

Para dos queda mal? Está claro que si te pones a hacerlo, vas a poner cantidad y si sobra se puede meter al congelador y luego pegarle una vuelta de microondas. Perderá algo de sabor, pero seguirá estando bueno. Que es pulpo, "polbo" que dicen en Galizia -y aquí si que me vienen un par de chistecitos-, al fin y al cabo. De todas maneras, de hacerlo para dos, con poner menos cantidad de todo ya estaría, no? El horno serían también dos horas o al haber menos con menos tiempo ya estaría?

Por cierto, con quien hay que hablar para que quitemos de una vez del español la interrogante abierta?

Un saludo.

Mari Carmen dijo...

Pues, a partir de ahora, ya puedes decir que conoces a alguien a quien no le gusta: a mi. De pequeña lo he comido mucho, quizás tanto que ahora no me gusta nada. Íbamos toda la familia en verano a pescarlos, con las gafas, tridente y rifle de aire comprimido incluido (dios mío, eso hoy en día sería impensable e incluso denunciable en unos niños, jajaja).
Pero ahora, aunque no lo como, lo sigo preparando y comprando, porque a mi marido le encanta en grado sumo. Besitos.