domingo, 26 de noviembre de 2017

ALCACHOFAS RELLENAS DE FOIE Y CREMA DE BOLETUS.

Cuenta la leyenda que en una isla del Egeo, hace muchos, pero que muchos años, cuando el dios Zeus aún andaba por la tierra y navegaba por los mares, vivía una hermosa joven de largos cabellos y ojos de color violeta llamada Cynara.
Y vino Zeus a recalar en la isla y se prendó de la belleza de la muchacha, cosa que, tratándose de Zeus era de esperar. Quiso Zeus llevarse a Cynara así, a las claras, sin convertirse en cisne, ni toro, ni lluvia de oro... . ¿Quién te habrás creído tú que eres? -debió pensar- y la muchacha le dió calabazas.
Sensiblemente enfadado, el padre de todos los dioses del Olimpo, decidió castigarla e hizo que le saliesen púas por todo el cuerpo y la convirtió en cardo para que nadie se acercase jamás a ella.
No quiso la muchacha moverse jamás de aquel sitio y allí echó raíces. Cuando florece, en las primaveras, sus ojos se vuelven a abrir mostrando su color violeta y, aunque esté llena de espinas, su corazón sigue siendo tierno, dulce y sabroso para quien lo prueba.
Las semillas de esa planta la trajeron a España los árabes, que llamaban alcaucíes a sus flores y nosotros denominamos alcachofas.
En esta ocasión vamos a cocinarlas así:

Ingredientes:
12 alcachofas.
Foie de pato mi-cuit.
Crema de boletus.

Cocer las alcachofas del modo que tengáis por costumbre. Dejar templar y colocar sobre una bandeja de horno o  fuente refractaria cortando previamente la base para que se mantengan derechas.
Separar con mucho cuidado las hojas haciendo un hueco en el centro para colocar el relleno.
Cortar el foie en cubos de unos dos centímetros de arista y ponerlos en el hueco que hemos abierto, acabar el relleno con una cucharada de la crema de boletus.
Introducir en el horno precalentado a 150ºC durante 10 minutos.

Confesiones de un impostor.
En este caso, las alcachofas eran congeladas (porque con las de lata no sale bien), el foie SÍ lo había hecho yo y la crema de boletus y trufa la había comprado en un tarro.

2 comentarios:

Mery dijo...

La receta tiene pinta de ser una exquisitez pero con la introducción da un poco de pena comerse a doncella tan ponderada.
Gracias mil.

Valdomicer dijo...

Mery:
A la doncella, no. Solo su corazón.